Numerosas evidencias clínicas avalan la asociación entre concentración plasmática elevada de homocisteína (hiperhomocisteinemia) y las enfermedades vasculares oclusivas, tales como la aterosclerosis y la trombosis. La homocisteína reducida (Hcy) y su éster cíclico homocisteína-tiolactona (HTL) serían los principales responsables de los efectos nocivos asociados a la hiperhomocisteinemia. Tanto la Hcy como la HTL pueden interactuar espontáneamente con proteínas, a través de reacciones de S y N-homocisteinilación, respectivamente. Ambos procesos provocan alteraciones proteicas post-traduccionales, e inducen cambios estructurales y funcionales a nivel molecular. En los últimos años ha cobrado interés el conocimiento acerca de la HTL y las consecuencias de... |