Desde su introducción en la Patagonia austral en 1946, el castor norteamericano (Castor canadensis) ha provocado graves impactos en ríos y bosques nativos. Científicos y tomadores de decisiones recomiendan su erradicación, requiriendo investigación para orientar acciones. John et al. (2010) mostraron que la predicción de presencia de castores, fundamental para planificar una erradicación, varía a través del tiempo (colonización inicial = ocupación de sitios al azar e impredecible; intermedia = ocupación predecible de sitios óptimos; antigua = ocupación impredecible de sitios sub-óptimos). Evaluamos presencia/ausencia de castores y variables de hábitat (geomorfología, suelo, vegetación) in situ y mediante imágenes satelitales en ríos de colonización... |