Los rumiantes alimentados con forrajes de elevado contenido de proteína rápidamente degradable en el rumen o suplementados con nitrógeno no proteínico, absorben cantidades sustanciales de amonio en el rumen y muy poca glucosa en el intestino, en circunstancias que requieren mantener una adecuada capacidad ureagénica y gluconeogénesis para sostener su eficiencia productiva. En esta condición se eleva la producción de amonio ruminal, el cual se absorbe y posteriormente se metaboliza por el hígado en urea. Las elevadas concentraciones de amonio en el rumen pueden sobrepasar la capacidad hepática de sintetizar urea, lo que provoca una sobrecarga en el ciclo de la urea y demanda una excesiva cantidad de α-cetoglutarato y oxalacetato para la formación de... |