Las elecciones generales de abril del 2009 cierran un primer momento de la Revolución Ciudadana. El recambio de élites, la transformación de las bases constitucionales del país, el giro de la agenda de políticas públicas –hacia lo que ha sido calificado como post-neoliberalismo– y la re-elección presidencial, se sucedieron a un ritmo a todas luces vertiginoso: veinte y ocho meses de gestión gubernativa. Solo a modo de contrapunto, en el proceso de cambio político conducido por el Movimiento al Socialismo (MAS) en Bolivia, el cierre de similar ciclo político (elección de fuerza antisistémica, cambio constitucional, giro en agenda pública, y re-elección presidencial) tomó a la fuerza gobernante todo el primer período de gobierno (2005-2009) del Presidente... |